En conferencia de prensa, este domingo, los ministros Arturo Murillo y Oscar Mercado abordaron varios temas, entre los cuales destacaron el ingreso de Bolivia a la llamada “cuarentena dinámica” y la re activación de ciertos sectores de la economía, a partir del día lunes, medida que generó muchas interrogantes en la población.
Puntualmente, según el ministro de trabajo, existen sectores muy importantes, como la construcción, la agro industria, la industria manufacturera, las trabajadoras del hogar, venta de comidas a domicilio y el servicio de delivery. La reglamentación para dicha implementación, se encuentra en el Reglamento para el sector de la Construcción y la Resolución Ministerial 01/20.
Analizando los reglamentos, saltan a la vista varias deficiencias, sin embargo, las principales son el transporte del personal de estos sectores y la acreditación de las empresas que están incluidas en los mismos. Estos factores están íntimamente ligados, ya que, según el reglamento, las empresas que estén interesadas en acreditar su funcionamiento, deberán cumplir con los protocolos de bioseguridad en el área de trabajo, además de garantizar la dotación de insumos de bioseguridad a sus empleados, lo cual será verificado y acreditado por el Ministerio de Trabajo, al cual la empresa deberá presentar la Ficha de Empleador. Es decir, que cualquier empresa que pretenda reanudar sus actividades en los sectores anteriormente mencionados, deberá contar con la autorización previa del Ministerio de Trabajo. Por otra parte, el transporte de los empleados debe ser garantizado por los empleadores, es decir, que la empresa debe encargarse del recojo y transporte de su personal en un vehículo, bajo las condiciones de bioseguridad establecidas. Dicho vehículo, obviamente, debe contar con la autorización correspondiente que solamente puede ser emitida por el Ministerio de Gobierno, es decir, Murillo y compañía.
Bajo estos aspectos, es evidente que solamente las grandes empresas y los afines políticos podrán acceder a la autorización de los ministerios mencionados y más que un intento de re activación de la economía, esto se trata de una extorsión a gran escala. Mientras que la mayor parte de la población esta nuevamente contra la pared y tiene dos opciones, continuar guardando encierro y padeciendo la carencia de recursos por miedo a la represión estatal o salir a conseguir el sustento para su familia y arriesgarse a ser detenido, maltratado y asaltado por policías y/o militares.
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